Hola a todos!

Estas palabras se las quiero dedicar a mi primo Silvio. ¿Por qué? Por lo siguiente.

Siempre ha rondado una frase cliché en mi mente, ésta es "no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy". No soy una persona muy cálida ni cercana con mis familiares directos o cercanos. No quiere decir que no me preocupe ni quiera lo mejor para ellos, sin embargo, es poco lo que llamo y son casi nulas mis expresiones de cariño hacia ellos. Se podría decir que es una deuda pendiente, una deuda histórica! Una deuda que siempre chuteo hacia adelante, la renegocio con el reloj cada cierto tiempo y punto!. Lamentablemente, como toda deuda, va creciendo si no se paga.

Por otra parte, les cuento sobre mi primo, Silvio. Es un gran hombre que por estos días está bailando con la fea. Unos malvenidos tumores le vinieron a joder la pita.

Como me gusta escribir, aquí le dedico estas palabras. Es un abono importante a mi deuda histórica y espero que se sume de buena forma a todas las muestras de cariño que cada uno de sus amigos le ha entregado.

¿Qué les puedo contar del Silvio? Que en este mundo hacen falta personas como él. Sin pecar de exageración es una especie de Benito Baranda 2.0! Se desvive por Un Techo para Chile y desde el 27 de febrero ha trabajado como nunca en aportar esfuerzo, dedicación, pasión y cariño por los que mas lo necesitan. Por eso digo que esos tumores vinieron a joder la pita. En mal momento llegaron.

Silvio tiene un slogan personal, "Prohibido detenerse". Pese a la pasión que ese slogan explicita, esta vez tuvo que detenerse, entrar a dique seco! Este primo es una máquina de entrega y cariño social pero, como toda máquina, necesita mantención. Estoy seguro que esta parada será sólo un lapsus en su vida. Es quizás el único momento que tendrá para preocuparse de él y no de los demás. Eso hace bien!

Primo, arriba el ánimo! Prohibido achacarse, permitido mejorarse!! Todos los que te conocemos te necesitamos sanito! Vamos que se puede!

Un abrazo

Marco